
De ahora en más, por más que me rompan las bolas para ir, no voy más. Que se caguen el Colo y Tatu, yo me quedo tranqui acá en casita. Tengo al pibe y mi “jermu” durmiendo, y yo en el comedor “solari”, listo para disfrutar.
Arranco nomás el partido… Que bien que estuve, nada de sufrimiento, tranquilito en mi casa, que cancha ni cancha.
-Que paso?! Cobro penal el hijo de puta. Pezzota la puta que te parió, ándate a cagar si no lo toco ladrón!!! Siempre lo mismo viejo, como nos cagan!!! Nos vas a cagar el campeonato!! Hijo de mil PUUUTAAAAAS!!
-GUAAAAAAHHHH!!!!
-Gordo se despertó el nene!, porque gritas así, ahora ocúpate vos!
-¡Pero ocúpate vos turra! ¡Mira lo que cobro este cornudo!! Ma sí, para que mierda me quedo en casa pudiendo ir a la cancha yo y putear tranquilo. ¡Me cago en Pezzota, este queso asqueroso, el pendejo gritón y en vos loca de mierda!! ¡No puedo creer lo que cobro, nos chorea en la cara!!! ¡Pezzota la puta que te parió!!!!...
(Pasados 10 segundos…)
-……Esta bien mi amor, perdón, me saca la injusticia, que se va a hacer. Ahí voy a ver al nene…., discúlpame por lo de loca, fue sin querer…
Cualquier personaje o hecho, con similitud con la realidad es pura coincidencia.
Autor: elEdu
A QUIEN ME HACE ACORDAR????? MMMMM. MUY BUENO EDU!
ResponderEliminarUuuuh! Cuántos caemos en una u otra situación. Personalmente no soy de ir a la cancha, pero si fui un condecorado cambiador de pañales cuando en tiempo de descuento teníamos al rival en un arco.
ResponderEliminarEn fin, son los quehaceres de la vida diaria. Algunos recién empiezan, otros ya ni se acuerdan.